lunes, 14 de noviembre de 2011

La vida en teoria


Que simple es la vida, todos desde muy jóvenes sabemos exactamente lo que tenemos que hacer. Nacer, crecer, reproducirnos y morir, que fácil es nuestra labor en este mundo, preservar la especie es nuestra única meta, la misma meta que tiene cualquier perro, gato o murciélago. En teoría no hay que hacer mucho, de nuestro nacimiento ni nos damos cuenta, nuestro  cuerpo crece solo y la muerte llega cuando le plazca, la reproducción tampoco es nada complicada, conseguir una pareja y juntos tener uno o mas hijos y cuidarlos hasta que se puedan cuidar solos. Que simple suena todo. Pero claro, solo es la teoría, la práctica es algo mucho más compleja, es como aprender a pilotear solamente leyendo un manual, simplemente imposible. La vida es complicada desde cualquier punto de vista, desde que nacemos nuestro cerebro no hace mas que captar cosas para nuestro aprendizaje, la niñez es una búsqueda desesperada de conocer el mundo que se basa en un “¿Por qué?”, y así vamos poco a poco despejando las dudas y perdiendo lo mas hermoso de la vida, la inocencia. Cuando no queda inocencia nos encontramos de frente con un mundo que no se parece en lo mas mínimo a lo que habíamos visto hasta entonces, vemos lagrimas donde solo habían sonrisas, lluvia aun cuando en lo mas alto de los cielos esta el sol, vemos rabia y hambre por doquier que nos hacen sentir impotentes y diminutos. Es contradictorio como mientras creces te vas sintiendo más pequeño e insignificante en este mundo, de niño el mundo es tan solo un dibujo que encuentras en un libro con pocas letras, y luego te das cuenta en un minuto cuan equivocado estabas. Pasas a sentirte diminuto y querer sobresalir de alguna manera, empiezas a pelear por ganarte un lugar en la sociedad, a veces haciendo cosas estúpidas o yendo en contra de tus propios principios e ideales. En la mayoría de los casos lastimosamente la gente pierde su rumbo, se pierde en un mundo que nos ataca constantemente y se rinde ante la presión para volverse uno mas y dejar de sobresalir por lo que es en realidad, es triste en verdad ver a tantos que se rindieron sin siquiera intentar. Seguimos creciendo sin parar, el mundo nos obliga a aprender de historia, algebra, literatura y geografía universal. Nos llenan de conocimientos básicos para que no seamos un fracaso y poder manejar nuestra vida de la mejor manera posible y así de alguna forma ayudar al gobierno en un futuro no muy lejano. De alguna forma nos miden para ver quienes pueden servirles mas, para en estos sus luces enfocar y muy de cerca vigilar, mientras los demás son casi desechados por no poseer cierta habilidad. Que bien hemos copiado a la naturaleza en la selección natural. Nos tratan de inculcar por todos los medios una ética y una moral ya establecida, nos tratan de volver personas integras para así poder tener una vida estable, y todo aquel que ose revelarse bien caro la paga. Saliendo de nuestra etapa de crecimiento, dando por hecho que logramos completar cada meta propuesta aun queda mucho dolor que aguantar, porque la vida siempre ha sido una duda eterna que no cesa, tan solo se transforma al igual que la energía. Ya entendemos como funciona nuestro cuerpo, nuestra historia y nuestra sociedad, ahora nos preguntamos para que llegamos a este lugar. Y si bien no es nada fácil manejar las emociones humanas, sentir el dolor mas angustiante en lo más profundo de tu corazón, saltar a la alegría de sentir vibraciones en tu estomago sin explicación, no sin ante pasar por la tristeza que te transmite ver una imagen que capta tu atención. Sentimos continuamente cosas que casi nunca entendemos y que por más que estudiemos a profundidad no se pueden evitar porque por más que estudiemos un pastel de chocolate jamás dejara de saber a chocolate. No hay que sentirse mal cuando no te conoces a ti mismo, es culpa de la sociedad que complico todo, del esquema inicial tan solo queda la muerte que es lo único que sigue viniendo cuando quiere, a veces sin aviso previo, a veces con meses de anticipación. Pero no podemos sentarnos a esperar que llegue, hay que ir a retar la sociedad y demostrarle que soy competente y que aunque digan que no, siempre voy a dar mas. Y es que al igual que un niño pequeño yo creo que el mundo puede ser un bonito lugar, creo que si todos ponemos algo, sin duda alguna algo hermoso saldrá. Pero no me ilusiono con fantasías infantiles, se que lo mas probable es que jamás vaya a pasar. Por ahora solo estoy en algún punto entre el principio y el final.


Por: Juan José Cadena D.

No hay comentarios:

Publicar un comentario