Cuéntame
de ti,
De
tu trabajo,
De
tus sueños,
De
tu color favorito
Siendo
enfática
En
el porqué de
Tu
elección,
Cuéntame
quién eres,
Quién
crees que eres,
Quién
quieres que
Yo
crea que eres,
Cuéntame
un secreto,
Acércate
a mi oído
Y
que sea apenas
Un
susurro que
Me
obligue a darte
La
totalidad de
Mi
atención,
Riámonos
juntos
De
lo que me contaste,
Mírame
a los ojos,
Hazme
sonreír
Sin
mayor esfuerzo,
Sonríe
también tú
Si
te entran
Las
repentinas
Ganas
de hacerlo,
Sonriamos
juntos
Bajo
el cielo nublado
De
modo que ni siquiera
La
luna sea testigo
Del
secreto que
Hizo
nacer
Tu
secreto
Al
posarse
Entre
mis pensamientos.
Cuéntame
de ti,
Todo
de ti,
Cada
detalle,
Cada
pormenor,
Cada
imagen que
Llevas
grabada en
Tu
memoria aunque
Sea
sin razón aparente,
Cuéntame
qué cantas
Mientras
estás en la ducha,
El
nombre de tu mascota,
La
historia detrás del
Tatuaje
que escala
Por
tu pierna derecha,
Cuéntame
los pormenores
Del
día más feliz de
Tu
vida hasta el momento,
Déjate
llevar por los
Recuerdos
y olvídate
De
que estoy aquí,
De
que te escucho,
De
que te miro,
De
que juego a
Seguirte
conociendo
Aunque
ya casi llegue
La
hora de despedirnos,
Déjate
llevar por la brisa,
Por
el silencio de la ciudad
Que
parece haber entendido
La
importancia del momento,
Por
la cercanía de nuestras
Pieles
que parecen
Mirarse
con mayor
Honestidad
que las
Propias
miradas distraídas
Que
nos lanzamos
Entre
frases,
Parpadeos
Y
suspiros,
Déjate
llevar
Por
el final abrupto
Al
cual estamos
Condenados
desde
El
instante mismo
En
el que,
Sin
buscar nada,
Encontramos
en la
Mirada
ajena,
Aunque
fuese tan solo
Por
un breve instante,
Aquel
anhelado descanso
Del
constante
Agobio
de estar vivos.
Cuéntame
de ti,
De
tus padres,
De
tu exnovio con
El
que guardo
Tan
marcada
Similitud,
De
los días tristes
En
los que deambulas
Por
la vida como
Un
autómata,
Todo
de ti,
De
la manera en que
Observas
los atardeceres,
De
aquella chica turca
Con
la que alguna vez
Sentiste
tanta empatía,
De
cuánto aprecias
Tu
independencia,
De
tus historias,
De
tus universos,
De
tus creaciones,
Que
tus ojos se iluminen
Mientras
hablas
Como
diciendo
“Oye,
esto es importante”,
“No
vayas a distraerte
Ni
un instante
Porque
de seguro
Esto
significaría
El
que no vuelva
A
contarte nunca nada”,
“No
interrumpas,
No
divagues,
No
parpadees
Más
de la cuenta”,
“Quédate
aquí conmigo,
Mientras
te obsequio
Una
parte de mí;
Lo
más importante
De
lo que soy”,
“¡Pasión!,
Esto
es pura pasión
Aunque
esté calma
Y
ni siquiera quiera
Regalarte
la pista
De
elevar mi tono de voz”
“Date
cuenta,
Por
favor,
¡Date
cuenta!”;
Permíteme
abrigar
Estas
palabras
Y
termina con
Un
largo silencio,
Déjame
abrazarte,
Percibir
tu respiración,
Sentir
tus dedos juguetear
Sobre
mi espalda,
Saber
que sonríes
Aunque
no tenga
Forma
alguna de
Ver
dicha sonrisa,
Déjame
sentir
Cómo
ahora decides
Contarme
de ti
Desde
otro lenguaje,
Sácame
otra sonrisa
Que
tampoco verás,
Sonriamos
juntos
Sin
saberlo,
Disfrutemos
Del
silencio
Con
sabor
A
lluvia,
Del
leve palpitar
De
lo que somos,
De
la comprensión,
De
la coincidencia,
De
la fugacidad
Con
la que la muerte
Parece
tomarse
Al
mundo sin
Aviso
alguno,
Del
silencio,
De
la mirada,
Del
tacto,
De
la oscuridad,
De
la nostalgia,
Del
silencio,
De
la parsimonia,
De
la caricia,
Del
silencio,
De
la despedida,
Del
silencio,
Del
silencio,
Del
silencio.
Por
favor,
Cuéntame
de ti.
Por:
Juan José Cadena D.