jueves, 10 de marzo de 2016

Un jueves cualquiera

Esperar un día,
Dos días,
Quince días,
Unas vacaciones
Demasiado largas,
Unas vacaciones que
Parecen estrangularme,
Encender las luces,
Apagar las luces
Del baño mientras
Estoy en la ducha,
Darme la llave de un
Candado que no utilizo,
Que no me gusta
Que no necesito,
Que necesito pero
No quiero utilizar
Porque no me gusta,
Que no me gusta para nada,
Que lleva un par de
Meses en mi mesa
De noche burlándose
De pesadillas que
Ni siquiera soy capaz
De recordar cuando
Me despierto agitado
Y con ganas de ser
Alguien más,
Un don nadie deambulando
Por calles que no tienen
Significación alguna
Más allá de sus direcciones,
De sus invasivos letreros,
De su léxico arquitectónico,
Sus semáforos y
Sus gentes que siguen
Cometiendo el error
De darle pinceladas
De utopía a la ciudad
Con infinita esperanza
En que la realidad no
Puede ir más allá de
Sus propios seres,
De que son alguien,
De que respiran,
De que sus ideas son
Más que el grito ahogado
De una consciencia que
Jamás solicitó, mereció
O debió existir pero existe,
De que aquella voz que
Los guía es un ser alado,
Un alienígena o un llamado
De otro plano para ser
Mejor persona y de paso
Brindarle un significado
Al concepto mismo de
Ser una persona,
Un ser humano,
Parte de una sociedad,
De un mundo que lucha
Día a día por entenderse
Para encontrar nuevas
Justificaciones al seguirse
Eliminando los unos a
Los otros en la búsqueda
De la añorada victoria que
Se hace esquiva al no
Ser más que suposiciones
Vagas que se contradicen
Pero al menos nos dan
La oportunidad de mantener
La mente ocupada y crear
Una que otra ilusión para
Seguir adelante,
Para levantarse una vez más,
Para dibujar un pez,
Para tararear esa canción
Que no nos gusta mientras
Nos duchamos y las vacaciones
Demasiado largas apagan
La luz una vez más para
Dejarnos ver que somos
Más autómatas de lo que
Somos capaces de admitir
Y que la filosofía no es
Más que una forma sofisticada
De entretenimiento.

Servir un vaso con agua,
Darse cuenta de que
No hielo en la nevera,
Tomar agua tibia,
Mirar el calendario,
Darse cuenta de que
Sigue siendo hoy aunque
No sea la misma persona,
Que el tiempo no parece
Tener interés alguno en mí,
En nadie,
En las ideas,
En sí mismo,
Sentarse en el mismo sillón,
Abrir el libro,
Perder la página,
No recordar el número,
Ir fisgoneando entre las frases
En búsqueda de recuerdos
Demasiado insignificantes,
Pasar el día buscando,
Decidir recomenzar el libro
Desde el comienzo,
Leer con mucho detenimiento,
Marcar las páginas leídas,
Terminar el libro,
Sentirse triste porque
El personaje principal
Fue asesinado a sangre fría
Por su mejor amigo al
Descubrir que este se acostaba
Con su esposa y que su hermano
Estaba enterado de esto
Hace varios meses
Pero decidió aceptar un
Par de billetes por semana
A cambio de no pronunciar palabra,
Leer un libro más,
Ver una película,
Ver una serie,
Ver el calendario,
Dormir mucho,
Dormir más de lo necesario,
Dormir por el placer de
Escapar del tedio,
Despertar aliviado por
No haber tenido que
Pasar todas esas horas
Frente al calendario.

Esperar un día,
Dos días,
Quince días,
Unas vacaciones
Demasiado largas
Que proceden una
Innumerable serie
De inconvenientes,
De malos entendidos,
De diálogos censurados,
De falta de sincronización,
De lujuria mal encaminada,
De expectativa creciente,
De besos que no se han dado,
De caricias sobre el papel
De olores estampados
En la pared de la misma
Habitación que ahora está
Llena de humo del tabaco
Que alguna vez estuvo en
Tus pulmones y jugueteó
Con la idea de posarse
En mis labios.
Un día,
Dos días,
Muchas horas,
Demasiado tiempo,
Demasiadas pesadillas,
Demasiadas ganas de
Que ya no sea hoy.

Por: Juan José Cadena D.