Deambular
la ciudad entera,
Darse
cuenta de la inutilidad
Misma
de andar sin rumbo,
Desplomarse
en cualquier
Banca
de cualquier parque
A
disparar con nuestros
Índices
a los desconocidos,
Seres
irrespetuosos
Tratando
de ser alguien
En
medio de la muchedumbre
Que
osan situarse frente
A
nuestros cuerpos,
A
infectar el panorama,
A
ser esa última cucharada
En
el plato que parece
Juzgarnos
desde los últimos
Respiros
de su efímera
E
inútil existencia.
Disparar,
disparar, disparar,
Disparar
desde el silencio
Con
una leve sonrisa
Entre
los labios,
Disparar
con el brazo
Entero
cuando el objetivo
Se
mueve de manera ágil,
Cuando
llega a soñar con
Escaparse
de la masacre,
Del
carnaval visceral imaginario
Más
grande del que se tenga
Reporte
en los periódicos.
Disparar
y que el tiempo
Siga
su curso sin remordimiento,
Disparar
al perro café oscuro,
A
la señora de falda larga,
Al
niño rubio que juega
Con
la rama a solo un par
De
metros de la banca.
Disparar
y no dejar sobrevivientes,
Levantarte
en medio del silencioso
Júbilo
de una victoria sin testigos,
Darte
una palmada en el hombro
Mientras
te alejas del campo
De
batalla sonriendo de nuevo.
Ver
de nuevo al niño,
Acercarse
a él sin motivo aparente,
Ver
la manera en que se aleja
De
ti con miedo en su mirada,
Disparar
de nuevo,
Dar
media vuelta,
Seguir
caminando.
Pasar
calles conocidas,
Recordar
historias,
Risas
del pasado que retumban
A
manera de jaqueca,
Voltear
la mirada,
Escupir,
Darse
cuenta de que la escupa
No
es más que babas burbujeantes
Ansiosas
por tener un mejor destino,
Seguir
andando,
Seguir
pensando en el escupitajo,
Seguir
acumulando ideas irrelevantes
Con
la esperanza de que el reloj
Algún
día se detendrá y todos
Tendremos
el tiempo suficiente
Para
compartir las más absurdas
Teorías
sobre el porqué de nuestro
Paso
por este insípido mundo
Que
parece no guardar sorpresa
Alguna
más allá de las fantasías
De
libertad inventadas por
Nosotros
mismos
A
manera de excusa para seguir
Matándonos,
insultándonos,
Endeudándonos,
admirándonos,
Mintiéndonos,
amándonos
Y
demás sinsentidos que
Hasta
llegamos a creernos
Por
minúsculos intervalos
De
tiempo que parecen
Tener
más valor que
Un
par de vidas desperdiciadas
Tomando
cerveza tibia
Frente
a un televisor.
Pero
no,
No
pasa nada,
Seguimos
aquí malgastando
En
aras de aprovechar cada instante,
De
vivir mejor,
De
encontrar el confort que
Se
nos escapó en una mala jugada,
De
negar a capa y espada que
La
vida puede resumirse en
Un
par de buenas conversaciones,
Pensamientos
que a nadie le interesan
Y
abrir las piernas de una mujer;
Seguimos
tratando de tachar
Cada
uno de nuestros traumas
Con
la misma pluma con la que
Los
hemos alimentado a lo largo
De
cada una de las noches en
Que
el sueño no era más que
Una
utopía con absoluta conciencia
De
lo absurdo de nuestro proceder;
Seguimos
recostados en la idea
De
que somos bocetos,
De
que no cargamos culpas,
De
que somos tan valiosos
Como
los grandes y los genios
Porque,
a fin de cuentas,
Todos
somos iguales;
Seguimos
queriendo poco,
Deseando
poco,
Anhelando
poco,
Haciendo
poco más que quejarnos,
Que
revolcarnos en nuestras
Desgracias
entre gritos a la espera
De
que un ser alado nos rescate
Para
indicarnos qué camino tomar.
Pasar
calles conocidas,
Recordar
momentos,
Pensar
que esos momentos
Son
ahora inalcanzables,
Entender
que la memoria
Es
el peor de los castigos
En
esta celda espaciotemporal
Porque
te permite tener
Y
no tener al mismo tiempo,
Porque
te regala espejismos,
Ecos,
Fantasmas,
Sentimientos
que ya no
Te
pertenecen,
Palabras
que nunca se dirán
Entrelazadas
con la idea
De
que la capacidad
De
imaginar es lo único
Que
vale la pena
Y
siempre se va
Demasiado
pronto.
Llegar
a la cama,
Intentar
soñar,
Quedarse
mirando el techo,
Contar
hasta cien,
Quedarse
quieto,
Respirar
lento,
Cerrar
los ojos,
Sacar
ese rostro
De
la mente,
Seguir
respirando,
Sacarlo,
sacarlo, sacarlo,
Comenzar
a sentir sudor
Recorriendo
la espalda,
Seguir
viendo el rostro,
Escuchar
las palabras
Que
ya no existen,
Respirar,
Contar
hasta cien,
Ver
esa risa,
Cambiar
de posición,
Verla,
Seguirla
viendo,
Seguirla
oyendo,
Seguirla
sintiendo.
Abrir
los ojos,
Respirar
lento,
Contar
hasta cien,
Cerrar
los ojos,
Ver
ese rostro,
Sonreír,
Disparar.
Por:
Juan José Cadena D.