Me
pregunto qué
Pasará
el día en que
Deje
de escribir.
No
mucho,
Supongo,
Será
apenas un
Silencio
que a
Nadie
incomoda,
Una
despedida
Sin
respuesta
Al
otro lado de
La
línea,
Un
aullido a
Las
nubes
Tras
las que
Se
oculta
La
luna.
No
se me van
A
caer las manos,
Ni
se borrarán
Todas
las letras
Que
han ya salido
De
las mismas,
No
dejaré de
Sorprenderme
Con
los detalles
Del
mundo que
Casi
siempre
Me
son esquivos
Ni
dejaré de contar
Los
minutos que
Se
me escapan
Por
andar perdiendo
El
tiempo,
Ni
de tomar
Fotografías
mal
Encuadradas
al
Cielo
filtrado
Entre
las ramas
De
los árboles
Por
estar convencido
Hace
ya
Muchos
años
De
que en alguna
De
esas ranuras
Encontraré
Algún
día
La
gran belleza
Que
casi todos
Buscan
entre
Las
gentes
Sin
mayor
Éxito.
Nada,
No
cambiará
Nada,
No
cambiarán
Mi
forma de caminar,
Mis
malos hábitos,
Las
muecas que
Hago
en el espejo,
Ni
la manera en cuento
Hasta
tres con
Los
ojos cerrados
Antes
de atender
Una
llamada de
La
mujer que
Me
retuerce
Las
entrañas
Con
su amor,
No
cambiarán
Los
ciclos lunares,
El
pronóstico
Del
clima,
La
música
Estruendosa
De
las discotecas,
Ni
la manera en
Que
las parejas
Se
miran cuando
El
amor va más
Allá
del deseo,
No
cambiará
Nada,
Absolutamente
Nada
Y
el mundo
Seguirá
dando
Vueltas
Y
el reloj
Seguirá
dando
Vueltas,
Y
las mismas
Tres
o cuatro ideas
Que
me persiguen
Desde
niño
Seguirán
dando
Vueltas
En
mi cabeza
Cada
vez que
Mis
ocupaciones
Den
algo de tregua
Y
me permitan
Disfrutar
de
Aquella
locura
Tan
propia que
Alguna
vez quise
Escribir
pero
No
pude.
Pero
qué
Pensamiento
Más
suicida,
¿No?,
El
de querer
Seguir
viviendo
Por
vivir,
Como
siento
Que
viven
Casi
todos
Los
que me
Pasan
enfrente
En
la cotidianidad,
¿O
acaso será
Un
impulso
Egocéntrico
por
Querer
diferenciarme
A
toda costa de
Eso
que llamo
De
manera
Tan
despectiva
“Todos”?
Tal
vez,
Aunque
no creo
Que
sea la respuesta
Completa
a la ecuación
Porque
a estas alturas
Sí
que siento un vacío
Al
no tener la posibilidad
De
estar aquí sentado,
Tecleando,
¿O
será tan solo
Otro
impulso
Egocéntrico
por
Sentirme
capaz
De
ser mi propio
Psicólogo
aquí
Sentado
imaginando
Que
alguien me lee
Y
sintiéndome
“Vivo”
por esto?,
Aunque,
Vale,
No
hay mayor
Expresión
de
La
vida misma
Que
el acto de
“Crear”,
Entonces
solo
Resta
preguntarse
Si
vale la pena
Crear
porque sí,
Porque
me
Vino
en gana,
Porque
puedo,
Porque
no se
Me
ocurrió nada
Más
sentado
Frente
a la pantalla
Y
se me cruzó
Por
la mente
El
no volver
A
escribir nunca
En
la vida
Por
miedo a que
Un
día de estos
En
verdad se
Me
acaben
Las
palabras.
Al
instante
Descarté
Esta
idea
Porque
dejar
De
escribir
Sería,
Para
mí,
Como
La
muerte,
Guardando
Este
par de
Conceptos
Una
relación
Tan
profunda
Que
hasta
Acarrearían
Las
mismas
Efímeras
Consecuencias.
Y
no hablo
Por
mí,
Hablo
por
"Todos".
Por:
Juan José Cadena D.
No hay comentarios:
Publicar un comentario